lunes, 2 de enero de 2012

Peñalara (2.460m). Ruta circular por las alturas de la Sierra de Guadarrama.


Parque Natural de la Cumbre, Circos y Lagunas de Peñalara, Comunidad de Madrid, España. 25 de junio de 2011.


Después de una primera experiencia alpina, Katarina está en forma y con ganas de más. Aprovechamos nuestra estancia, de unos días, en Madrid para acercarnos a la Sierra de Guadarrama y hacer una ruta circular por el Parque Natural de la Cumbre, Circos y Lagunas de Peñalara.

A pesar de que ya en los años 20 del siglo pasado hubo un proyecto de Parque Nacional para proteger las zonas de gran valor ecológico de Guadarrama y que en 1930 fue declarado Sitio Natural de Interés Nacional, no fue hasta 1990 cuando la Comunidad de Madrid otorgó a esta zona el título de Parque Natural de la Cumbre, Circos y Lagunas de Peñalara. Está previsto que en los próximos años esta área protegida sea declarada Parque Nacional.

La importancia del Parque Natural viene dada por una combinación de elementos geográficos, biológicos y paisajísticos de primer orden. Entre ellos destacan el Circo de Peñalara, de origen glaciar, así como las lagunas y humedales, declarados en 2005 sitios RAMSAR. La flora y la fauna, especialmente los relacionados con las lagunas (siete de las diez especies anfibias del parque están en peligro de extinción) son otros de los tesoros protegidos de este parque.

En fin, un magnífico lugar por el que pasear, siempre en los límites balizados de los caminos, y disfrutar de una jornada de montaña y naturaleza. En esta ocasión, como lo hiciéramos el verano anterior en la excursión a la Cabane des Dix, en los Alpes, en compañía de Eloy y Diana.


A mis lectores:
Os deseo un muy feliz y muy fecundo año 2012. En la montaña y fuera de ella. Muchas gracias por estar ahí, siguiendo este blog y aportando con vuestros valiosos comentarios y opiniones.
Salud y Montaña amig@s.



RUTA

Llegamos por carretera al puerto de Cotos, entre las provincias de Madrid y Segovia, a 1.830 metros de altitud. Dejamos el coche en el aparcamiento y ascendemos, siguiendo la carretera, hasta el Centro de Interpretación del Parque Natural de la Cumbre, Circos y Lagunas de Peñalara. Seguimos la senda bien balizada hacia el NE, en dirección a la Laguna Grande. Siguiendo la senda hacia la Laguna de los Pájaros, bordeamos el contorno SE de los picos de Peñalara y pasamos varias lagunas hasta llegar a la última, la de los Pájaros. En este punto podemos ver la cresta que deberemos recorrer para alcanzar la cima de Peñalara (2.460m). La bajada se hace por el itinerario más corto, el que sube de Cotos directamente, y así completamos nuestra ruta circular en dicho puerto.

DESNIVEL POSITIVO
600 metros

TIEMPO

Excelente. Soleado y templado. Temperatura entre 25°C y 18°. Sin viento.


CROQUIS




DURACIÓN

Centro de Interpretación– Laguna Grande (45min) – Inicio cresta (2h) – Cima Peñalara (3h30) - Centro de Interpretación (4h45).


DIFICULTAD
 

Ninguna dificultad técnica. Caminos balizados, amplios, sin pérdida. Poco desnivel y pocas fuentes de agua.


DESCRIPCIÓN

23 de junio de 2011. Acabamos de aterrizar en España y hace mucho calor. Como siempre en verano. Pocos días después de nuestro paseo por las alturas de Chamonix, donde no solo tuvimos una magnífica experiencia en la montaña sino también una meteorología pluscuamperfecta, nos sentimos animados, y preparados, para más montaña.


Hacía tiempo que quería ir a Peñalara, de la que mi hermano me había hablado varias veces, puesto que había ascendido esta cumbre varias veces. Este verano era un buen momento para acometer esta ascensión a una cumbre sin ninguna dificultad en verano y muy accesible. Buscando información sobre el Parque Natural de Peñalara, vi que podíamos hacer una ruta circular que pasase por las lagunas, los circos y, finalmente, la cumbre principal de la Sierra de Guadarrama, así que me decanté por esa opción. La que mayor interés podía despertar en mis compañeros de excursión.


Como suele pasar cuando somos varios, salimos tarde de casa y llegamos al punto de inicio de nuestra ruta a las tres y media de la tarde. Cierto es que finales de junio es una época del año sin problemas de luz natural, lo cual, sumado a las condiciones atmosféricas óptimas que se disfrutaban en ese momento, nos tranquilizaba y permitía estar hasta tarde en la montaña. A las 15h30, bajo un sol de justicia y después de habernos preparado, emprendemos la marcha hacia el centro de interpretación del parque. Tomamos una senda ancha que lleva, a través de un pinar, hacia la Laguna Grande. El camino está bien balizado, muy transitado, al estar en las cercanías de importantes núcleos de población y recorrer una orografía asequible para todos los públicos. Ello no le resta interés, en realidad atraviesa parajes muy bellos y ofrece unas vistas magníficas sobre la sierra madrileña y sus aledaños segovianos.


En pocos minutos, Katarina y yo nos distanciamos de Eloy y Diana, que caminan a un ritmo más lento. Nuestra aclimatación alpina y, sobre todo, la forma y buen ánimo de mi chica, hacen de la excursión un paseo muy agradable. Pronto dejamos atrás los pinares para salir a la luz directa del astro rey, que llevaremos clavado en la nuca durante unas horas, y nos acercamos a la Laguna Grande, donde una decena de personas se afana en hacer fotografías, comer un bocadillo o, simplemente, tomar el sol. Eloy y Diana llegan en unos minutos, y los cuatro juntos nos hidratamos y posamos para el recuerdo delante del circo que encierra la laguna.


Proseguimos nuestra ruta hacia el NE, descubriendo las otras Cinco Lagunas, más pequeñas, y otros bellos parajes, siempre bajo la mirada atenta de las aves rapaces que sobrevuelan el parque buscando presas, y siguiendo el la senda que conduce a la Laguna de los Pájaros, la última, la más septentrional. Tomamos fotografías de los humedales, la flora y algunos de los animales que alberga el parque, entre ellos las vacas que pastan en los prados de altura, a más de 2.000 metros. No hay duda de que el entorno es excepcional, y además, gracias a la hora tardía, nos encontramos prácticamente solos durante buena parte del recorrido de nuestra ruta circular. Concretamente hasta llegar al cordal que nos llevará a la cumbre de Peñalara, ya cerrando la bucle.


En efecto, al dejar atrás la Laguna de los Pájaros, nos encaramamos al Risco de los Claveles, donde nos sorprende una carrera de montaña, cuyos participantes muestran evidentes signos de cansancio y deshidratación. Alguno de ellos llegó a vomitar del sobreesfuerzo unos metros delante de nosotros. Le ofrecimos un poco de agua, pero declinó el ofrecimiento, tenía un camelback. Entre tanto, Diana y Eloy seguían detrás de nosotros, y así fue hasta la cumbre de Peñalara, que alcanzamos después de recorrer la rocosa senda que conduce a ella desde el NE. Durante la ascensión final, en la cresta, podemos divisar la llanura castellana que se abre ante nuestros ojos, con las tierras segovianas, Valsaín y la Granja de San Ildefonso en primer término. La vertiente norte de Peñalara es muy rocosa, pedregosa, hasta la cota 1.900, donde los pinares hacen su aparición.


Hacia las siete de la tarde alcanzamos la cima de Peñalara (2.460m), después de haber recorrido una cresta rocosa y haber saltado de bloque en bloque de piedra intentando esquivar las omnipresentes mariquitas que revoloteaban en este cálido atardecer. Kattis está contenta, es la primera de los cuatro en cumbre, es una recompensa a su buena forma y a sus penurias chamoniardes. Nuestros compañeros llegan en pocos minutos. Nos bebemos los últimos tragos de líquido y emprendemos rápidamente el descenso, que es pesado y discurre por la ruta normal, ancha como una pista forestal. En poco más de una hora estamos en el aparcamiento del puerto de Cotos y la excursión, ya con los últimos rayos de luz, llega a su fin.


Una vez más, esta vez en la Sierra de Guadarrama, la montaña nos ha dado un respiro, un tiempo de libertad y disfrute, los cuatro juntos, como aquel día en los Alpes. Esperemos que sean muchos más. Peñalara es un entorno magnífico, de gran interés para el que viene de otros macizos, y del que los madrileños y segovianos deben sentirse orgullosos.


Salud y Montaña



Kattis en el pinar

El circo glaciar de Peñalara

La Laguna Grande

El paraje de Cinco Lagunas

Vacas y terneros

Cinco Lagunas

Flores

Más humedales

Inicio de la cresta, con corredores de montaña

Laguna de los Pájaros con la cresta

Tonos malva

Camino de Peñalara

Sendas mágicas

Cerca de la cumbre



Kattis en la cima de Peñalara (2.460m)

Caballos al atardecer

Bóvido

PS: Los comentarios son fuente de motivación para la existencia de un blog. Si algo te gusta (o si no) coméntalo para que en el futuro siga habiendo nuevas entradas. Gracias.

No hay comentarios: